
a quedarte sola, a nunca encontrar
a tu alma gemela; pero no te preocupes
que ya llegara, que las cosas se dan
sin pedirlas, sin intentarlo, o que
en algunas veces lo tenemos enfrente
y no nos damos cuenta.
Y aunque esto no lo diga el hecho
es que aquí estoy enfrente a ti,
que me he enamorado de ti desde el
primer día en que te vi.
En cierto punto de nuestra amistad he
tomado la decisión de no decir nada por
miedo a que cambie, por la actitud que
podrías llegar a tomar acerca de mis
sentimientos hacia ti, que las cosas
no serian iguales entre nosotros, en si,
a perderte como amiga.
Pues te dejo para verte otro día,
llevándome conmigo mis sentimientos
y secretos que tal vez algún día
conocerás.
Kukufato Company
18 y 19 –Junio-2001
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